lunes, 11 de enero de 2010

Una cornada termino con las aspiraciones de Tendero


“¡Que viva Quito!” se escuchó en todos los rincones de la plaza de toros que se llenó de espectadores. El sol intenso pegaba en los rostros del público atento a lo que pasa dentro del círculo. El novillo, sangrando de su lomo que fue clavado por dos banderillas, cargaba violentamente hacia toda persona que entraba al ruedo.

El matador Fernando Tendero, quien usó un traje dorado que brillaba con los rayos del intenso sol quiteño, aseguraba que el toro este posicionado perfectamente para la estocada. Con su mano derecha alzó su espada para medir su blanco. En un movimiento el matador y el toro se enfrentan, pero la maniobra fue errónea y el toro logra penetrar 12 centímetros de su cacho en el muslo del matador español.

Los rostros de felicidad, de júbilo de un público que festejaba las fiestas de la capital ecuatoriana cambiaron instantáneamente a gestos de terror y angustia. Se escuchó gritos de preocupación y un espectador fue removido de su asiento al gritar “Toma tu merecido torero”.

Su cuerpo herido fue retirado del ruedo y llevado a la clínica donde los paramédicos aseguraron que la cornada no cortó venas o arterias. El matador ecuatoriano Juan Francisco Almeida entró para encargarse de ejecutar al animal pero sus intentos fueron en vano ya que no logro estocar bien al toro.

Después de 5 intentos, el toro llamado Trinidad cayó al piso desangrado y cansado. Con el golpe de gracia en la nuca, el toro de lidia por fin fue fenecido.

3 comentarios:

Ivonne Naranjo dijo...

ni arte ni cultura, eso es tortura!!!! estoy en contra de la corrida de toros, y no me alegra ver como seres humanos "racionales" juegan a matar animales. Con esto no quiero cambiar la ideologia de nadie, pero los quiteños deberia pensar mas en que se basa nuestra cultura.!!!!
Ivonne Naranjo

Anónimo dijo...

La tauromaquia se supone que debe ser un arte, pero que el torero falle ya no causa del espectaculo algo que se pueda disfrutar, solo con la descripcion de como cayó el toro es suficiente para rechazar estos actos.

Anónimo dijo...

I have to conquer I say we take the weapons from the bullfighter and watch him run around gettin stabbed for a laugh